Una de las primeras gestiones que hay que realizar una vez que se haya consumado el proceso de divorcio son las gestiones de los contratos de luz. Y es que, efectivamente, si el miembro de la pareja que se vaya a quedar con la residencia familiar no es titular del contrato eléctrico deberá cambiarlo. En este artículo te vamos a contar todo lo que necesitas gestionar para que no tengas ningún problema con los contratos de luz.
¿Qué es el cambio de titular de la luz?
El cambio de titular con Endesa o la compañía que corresponda por un divorcio es una gestión que debe hacerse de forma obligatoria. Y es que el suministro de luz siempre debe estar a nombre de alguien, y este se convierte en el responsable de cualquier gestión. En este sentido, al no cambiar los datos con Endesa, Iberdrola o cualquiera que sea la comercializadora, el cónyuge que ya no vive en el hogar seguiría siendo el responsable, aunque efectivamente no viviera allí. Además, si no se hace el cambio el miembro de la pareja que se quede en la vivienda no podrá ni cambiar las tarifas ni solicitar las facturas ni ninguna otra gestión exclusiva para titulares.
¿Es necesario dar de alta la luz en un divorcio?
El cambio de titular se debe hacer cuando en la vivienda los suministros se encuentren activos y estén a nombre del anterior cónyuge. Sin embargo, en caso de que en la vivienda familiar se haya producido una baja del suministro y se quiera volver a activar, será necesario dar de alta la luz de nuevo. Por supuesto, el precio por dar de alta la luz en Naturgy es el mismo que en Endesa y en las demás comercializadoras, por lo que no te debes preocupar por qué comercializadora realizar la gestión. Solo es necesario que encuentres la tarifa más adecuada.
¿Cuáles son los requisitos necesarios para gestionar los contratos de luz tras un divorcio?
Para poder realizar el cambio de titular de la luz será necesario presentar el certificado de divorcio o cualquier otro requisito que acredite el usufructo de la vivienda como pueden ser las escrituras de la vivienda o el contrato de alquiler. Una vez que hayas presentado la documentación, el cliente deberá esperar aproximadamente unos 10 o hasta 15 días hábiles para que se produzca de forma efectiva el cambio de titular. Por supuesto, si tienes un contador telegestionado, este proceso podría acortarse mucho ya que la distribuidora puede cerrar el ciclo de facturación de forma telemática.
Por supuesto, es importante destacar que la gestión el cambio de titular no tiene coste alguno: es un trámite completamente gratuito que no dejará rastro en tu factura. Igualmente hay que saber que puede realizarse tantas veces como haga falta sin ningún tipo de límite; es decir, que si tres meses después del divorcio quieres alquilar la casa, y un nuevo inquilino llega, no tendrás ningún problema para hacerlo.
¿Quieres saber más consejos muy recomendables tras un divorcio? Entonces no te pierdas este artículo.